Si el GP de China fue una carrera más que entrenida, ¡qué decir del GP de Turquía! ¡Qué 10 primeras vueltas, aquello era un sin parar de frentes en liza! Luego la cosa se moderó un pelín y en las 10 últimas vueltas, cuando Alonso empezó (brevemente, todo hay que decirlo) a restarle décimas a Vettel, en Red Bull se dijeron "vamos a acabar con este jolgorio", hicieron entrar a su piloto, cambiaron gomas y la cosa cambió. A ello tenemos que añadir el adelantamiento de Webber a Alonso, que se dijo a sí mismo que un podio era de lo mejorcito que podía pescar hoy y levantó el pie del acelerador. Resultado: otro doblete de Red Bull, aunque no tan aplastante como pudiera parecer. Vettel desde luego no sufrió por ver disputada la victoria, pero parece que en Ferrari ya están haciendo los deberes y presentando un coche que puede competir, poco, pero puede competir. Quizá en Montmeló, en quince días, la batalla entre Red Bull y Ferrari sea más de tú a tú, quizá sí haya esa (r)evolución en Maranello. Hoy por hoy, sin embargo, y sin demasiados triunfalismos (que el campeonato es muy largo), Red Bull manda.
Desastroso último pit stop de Hamilton, que quizá hubiera podido disputarle el podio a Alonso, pero con un 4º puesto puede también estar muy satisfecho. Mantiene el segundo puesto en la general, pero que no se confíe, que hasta Alonso (5º) la distancia no llega a la carrera (18 puntos). Quien sí tiene ya un cierto colchón es Vettel, cómo no, con 34 puntos de diferencia sobre Hamilton y 38 sobre su compañero de equipo Webber. A Massa le falta algo más que un hervor, Rosberg pudo dar la campanada hoy (con esa magnífica salida) pero poco ha avanzado en su campeonato particular; los Renault parecen haberse estancado (veremos si en Montmeló presentan novedades), Schumacher sigue sin aportar prácticamente nada (lo duro que tiene que ser para un heptacampeón que las cosas no salgan).
Alguersuari no mejora tampoco, sigue sin puntuar y pronto en Toro Rosso comenzarán a pincharle, si no lo han hecho ya; pensemos que el asiento de Webber en Red Bull queda libre a final de temporada y las bofetadas para ocuparlo entre Buemi y él, sin descartar un fichaje estrella de fuera (¿Hamilton?), serán sonoras a medida que avance el campeonato. Su propio puesto en Toro Rosso no parece estar seguro (Buemi ya lleva seis puntos).
Por cierto, cuatro carreras y apenas ha habido choques importantes. El coche de seguridad lleva en el garaje desde el pasado campeonato. Las nuevas normas favorecen los adelantamientos, las paradas en boxes se multiplican (quién iba a decirle a Ferrari hace un año que pararía 4 veces en una carrera y sin que ello fuera causado por problemas de ningún tipo). La estrategia de carrera no racanea en cuanto a la emoción. Nos lo estamos pasando realmente bien en este 2011.
Vamos con las clasificaciones:
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